La acreditación de nuestras carreras, logro que implica nuevos compromisos
En febrero y marzo de 2007, los consejos acreditadores que durante 2006 evaluaron nuestras licenciaturas notificaron oficialmente a la Dirección de la Facultad que habíamos logrado el objetivo que nos planteamos en mayo de 2005: acreditar todas nuestras carreras en beneficio de la institución, pero sobre todo en apoyo de nuestros estudiantes y egresados, que de esta manera no se encuentran en desventaja cuando se incorporaran a los diferentes campos del ejercicio profesional.
El logro alcanzado es muy importante y, sin duda, nos debe generar satisfacción, habida cuenta que el reconocimiento obtenido proviene de organizaciones no gubernamentales debidamente autorizadas por el Consejo para la Acreditación de la Educación Superior A.C. (Copaes), que a la vez se especializan en la evaluación de la enseñanza de la química y de sus principales aplicaciones.
Otro motivo para estar orgullosos reside en la comprometida disposición de nuestra comunidad durante el largo y desgastante proceso de autoevaluación y acreditación que experimentamos de septiembre de 2005 a noviembre de 2006. Sin lugar a dudas, el hecho de constatar que tantos profesores, estudiantes y administrativos trabajemos diariamente en forma coordinada y armónica impresionó positivamente a nuestros pares, prestigiados docentes de otras instituciones de educación superior, quienes a través de la minuciosa revisión de los múltiples documentos que entregamos, así como su visita a nuestras aulas, laboratorios y demás recintos, comprobaron el alto nivel de nuestras tareas de docencia, investigación, organización y convivencia.
Evidentemente, los evaluadores nos hicieron interesantes recomendaciones, la mayor parte de las cuales deberemos cumplir en el corto plazo. Dicho cumplimiento y la actualización anual de los datos recabados durante 2006 representan actividades adicionales que deberemos acostumbranos a realizar, aceptándolas como necesarias para mejorar la condición de calidad que nos ha sido reconocido a través de la acreditación de las cinco carreras que se imparten en la Facultad de Química.